domingo, 8 de julio de 2012

CONVERSACIÓN CON LA LUNA LLENA


-¿Qué haces lobo?- preguntó.

El lobo sorprendido respondió:

-Hago lo que hacen todos los lobos.

-¿Y qué es lo que hacen todos los lobos?

-¿Tú qué crees?

-¿Aúllan? 

El joven lobo ofendido retiro su mirada fija en la luna llena y miró los ojos color miel de Gabriela.

-¿Aúllan?, no, no aullamos. Sólo tenemos una conversación.- y nuevamente fijó su mirada en la luna llena.

-¿Una conversación?

-Sí.

-Pero acá no hay nadie además de mí para tener una conversación.

-Que vanidosa eres. No eres la única con la que converso… también hablo con la luna llena.

-Dime, ¿cómo hablan?, escucho tu voz, pero no la de ella.- dijo señalando la luna llena.

El joven lobo de nuevo clavó sus ojos en los de Gabriela.

-Ella no tiene voz, ella está llena de oídos.

Luego bajó su mirada y contemplando el lago donde se veía el reflejo de la luna llena, dijo:

-La luna llena se ve con nuestros ojos, y nosotros, querida, nos escuchamos con sus oídos.

2 comentarios: